Supongamos que te apasiona la repostería, que además eres hábil en eso, y por ello decides compartir tus conocimientos creando contenido de recetas y tips reposteros en tu red favorita: Tik Tok, además de abrir un micronegocio para vender lo que preparas.

El tiempo avanza, tú debes decidir hacia dónde avanzar, y entonces entra en juego tu propósito, que incluso sin estar consciente de ello, puede terminar definiendo el camino que seguirás.

Si tu propósito es vivir de lo que te apasiona: Tal vez te darás cuenta de que la repostería no deja tanto dinero o seguidores como esperabas, pero tú serás constante y seguirás dando pasos cortos pero firmes para consolidar tu imagen y negocio, dejando las grandes ganancias y la prisa de lado.

Si tu propósito es hacerte de dinero (mucho): Tal vez te darás cuenta de que la repostería ya no es lo más popular, y ahora es la comida orgánica la que la rompe. Tendrás entonces que dejar de lado tu pasión y preparar comida orgánica, en tus contenidos y para vender, porque es ahí donde están las ganancias… ahí, o en algo completamente distinto.

Si tu propósito es la fama o popularidad: Tal vez te darás cuenta de que el contenido educativo en Tik Tok no tiene tanto éxito, es el entretenimiento el que genera engagement. Entonces tu pasión y tu negocio pasan a segundo término, y puedes terminar haciendo comedia o chismes para poder ganar seguidores y monetizar. Y como la fama pasa rápido, tal vez pronto debas cambiar todo nuevamente.

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Si tu propósito es ser feliz y tener una vida equilibrada: Tal vez te llegue el momento donde tu imagen o negocio están listos para dar el siguiente paso y masificarse, pero eso implica que inviertas demasiado tiempo y recursos para apostarle al desarrollo. Decidirás entonces que ‘así estás bien’, y continuarás con seguidores e ingreso moderados, pero tiempo suficiente para dedicarlo a otras cosas.

Si tu propósito es tener éxito: Primero deberás tener claro qué es el éxito para ti y tu situación… seguramente la definición caerá en alguno de los puntos anteriores, y deberás ir por ahí.

Define tu propósito

¡Es el primer paso! Las formas, medios, canales, actividades, productos, mercados, modelos de negocio y más elementos, se convertirán solo en herramientas para conseguirlo una vez que logras capturar el cuadro completo y fijarte metas claras.

¡Ojo! utilicé el primer ejemplo que me vino a la mente, sin embargo, estoy seguro de que podrás desarrollar cada uno de los puntos basado en tu situación actual, y en cómo quieres que tu camino se vaya abriendo.

Piensa: Tu trabajo, tu carrera, tu puesto, tu negocio, tu preparación, tu actitud, las personas que te rodean, ¿Son los correctos?

Tu trabajo, tu carrera, tu puesto, tu negocio, tu preparación, tu actitud, las personas que te rodean… ¿Son los correctos?

Pregúntate si lo que estás haciendo hoy te acerca al lugar en el que quieres estar mañana.
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